Colocar la responsabilidad de lo que nos sucede en algo externo.
Este factor bloqueante sucede cuando colocamos la responsabilidad (o la culpa) de la situación que podemos estar viviendo, de como nos sentimos, o de lo que no podemos conseguir, fuera de nosotros.
- No puedo tener una relación estable porque todo el mundo está para la joda
- No consigo un buen trabajo porque no estoy tan capacitado como otros.
- Me siento así porque mi pareja es muy controladora.
- No lo hago porque en mi pareja no se puede confiar.
Toda relación causa-efecto que determine el motivo por el cual nos sucede lo que nos sucede, son tan solo explicaciones que nos damos para tratar de entender el motivo detrás, pero funcionan como bloqueos porque al colocar la responsabilidad en algo externo nos impedimos ver la responsabilidad propia sobre lo que sucede.
Creer que “así es la vida”.
Este factor bloqueante, que tiene una cuota del punto anterior al colocar la responsabilidad de lo que sucede en algo externo, se le suma la creencia que aquello que nos pasa son argumentos suficientes para asumir que así es la vida.
Desde síntomas físicos hasta situaciones repetitivas que nos sucede. Cuando colocamos algo dentro de lo que es “normal” para nosotros, asumirlo que “es lo que es” sin cuestionarnos si eso que vivimos podría ser distinto.
Lo que nos sucede nunca son argumentos para determinar de que “así es la vida”, sino más bien, indicios para descubrir cómo somos nosotros, ya que todo nos puede llevar a tener un mejor entendimiento de nosotros mismos.
Lo positivo de los conflictos
En todo conflicto también se esconde algo de “positivo”, por lo que muchas veces, inconscientemente o emocionalmente, preferimos no resolverlo, porque su presencia nos está beneficiando de alguna manera.
- Entrar en una relación estable puede significar “abandonar” a la madre.
- Ascender en el trabajo puede implicar dejar de estar tanto tiempo con la pareja.
- Comenzar un proyecto personal puede implicar soltar la empresa familiar.
Aquello “positivo” que se esconde detrás del conflicto es lo que verdaderamente está bloqueando nuestro avance, porque es lo que emocionalmente más se nos dificulta resolver y soltar.
Hay un aspecto que todos estos factores comparten, y tiene que ver con la responsabilidad sobre lo que nos sucede, tanto sus causas como sus consecuencias. Quien logra asumir la responsabilidad sobre aquello que le genera conflicto o le afecta emocionalmente, está más cerca de encontrar su solución.