LAS COSAS COMO SON
Nuestra forma de ver lo que nos rodea está condicionada, sin que nosotros lo sepamos, por varios filtros que de forma inconsciente aplicamos a lo que nos sucede. Estos filtros son producto sobre todo de la historia personal que cada uno de nosotros lleva consigo. Cada experiencia vivida en el pasado con un alto peso emocional teñirá las situaciones futuras de una manera diferente, por ejemplo, a la de otras personas que no lleva consigo esa carga emocional en esas situaciones.
Si durante nuestra infancia, por lo que vivíamos en nuestro hogar, fuimos receptores de violencia o malos tratos, es natural, hasta por una cuestión de supervivencia, que durante nuestra vida adulta seamos más sensible a ciertas situaciones con un grado de violencia menor que una persona que no vivió eso durante la primera etapa de la vida. Y así con todo lo que fuimos absorbiendo en esa etapa.
Los filtros que aplicamos son automáticos, y suceden a través un proceso mental que comienza cuando vemos y escuchamos lo que nos sucede y termina cuando somos consciente de todo eso que está sucediendo.
¿QUÉ QUIERE DECIR NO VEMOS LAS COSAS COMO SON SINO COMO SOMOS?
Si la información que nos llega está filtrada, por eso se dice que no estamos frente a la realidad, no vemos las cosas como son, sino que estamos frente a nuestra interpretación de la realidad, estamos frente a nosotros mismos. La realidad es, por lo tanto, aquello que nosotros entendemos de lo que sucede sumado a la explicación que le damos a eso que sucede, todo producto de nuestra historia personal.
La interpretación es la que genera muchos de los conflictos que tenemos día a día. Desde algo que nos molesta del otro, algo que vivimos y nos causa dolor o hasta nuestro propio diálogo interno. Todo es resultado de nuestra forma propia y particular de percibir la realidad.
Tomar consciencia de esto es fundamental, ya que nos enseña a que debemos tomar distancia de las situaciones que nos generan conflictos para intentar verlas de otra manera. Esto no es para nada sencillo, porque solemos interpretar sin saber que lo estamos haciendo.
Una forma práctica para darnos cuenta de esto es reflexionar sobre cierta situación que nos está afectando, si otra persona en nuestro lugar lo viviría de la misma manera, o tal vez esa persona podría entender o responder de manera diferente a eso.
Desde la Bioneuroemoción® trabajamos sobre la interpretación de las situaciones conflictivas que vivimos. Los hechos no pueden ser cambiados, la interpretación sí, y cambiarla hace que cambien las emociones asociadas y así logremos ver el conflicto de otra manera, sobre todo una manera que nos permita actuar y gestionar eso de una forma más saludable.
Nunca estamos frente a la realidad porque no vemos las cosas como son, sino que las vemos como somos.
